Muy estimado hermano Daviel: Bendiciones en Cristo Jesús!Soy un pentecostal no-convencional de segunda generación y pastor desde la edad de 17 y mis últimos 26 años los he vivido en este país [Estados Unidos]. Dedique a la tarea pastoral 31 años, 9 años a las Comunicaciones Cristianas y 6 años a la función de Obispo de Iglesias y Pastores Hispanos en dos diferentes Regiones de esta nación [...] Mi amado hermano, no estoy ofendido, creo que ha sido bueno el intercambio de perspectivas sobre la temática concerniente a la beligerante relación de judíos y palestinos. A mi edad, considero que debo agotar el recurso del dialogo y la reflexión en el marco de un análisis mesurado y consistente con lo que nos dicen las Escrituras. Me honras y distingues al darle atención a mis planteamientos y compartir los vuestros con este consiervo y hermano.
Querido hermano y consiervo en la obra del Señor: Bendiciones.
Gracias por su carta, su comprensión y sensibilidad. Creo que esa es la actitud correcta de todo aquel que ama al Señor y su Santa Palabra. Gracias también por el tiempo que dedica al servicio de los hispanos en este país. Es realmente necesario que más creyentes como usted se involucren en el trabajo que están realizando a favor de los hispanos.
Ciertamente mas que teológica mi postura busca ajustarse a lo que dice la Biblia, aunque se que hacemos teología cuando nos expresamos desde el punto de vista cristiano y escritural. Y en este sentido entiendo que quienes miran y consultan el asunto bajo el lente de la alta crítica y no le dan crédito a la inerrancia e inspiración verbal de la Biblia tienen un punto de vista más políticamente correcto que se ajusta a la opinión pública. Por lo tanto, no soy PC, es decir, no compatible con la opiniones mayoritarias.
Es cierto que no podemos escapar de esta realidad, pues ultimadamente todo lo que decimos o hacemos está influenciado directa o indirectamente por lo que creemos. Yo también comparto su sentir de no ser políticamente correcto, pues esa filosofía no solo lleva a comprometer la sana doctrina, sino también a restarle importancia a las verdades bíblicas tal como las encontramos expresadas en la Palabra de Dios. Es por eso que en la actualidad los que abrazan esa filosofía favorecen desde la práctica del aborto hasta el homosexualismo como algo legítimo.
En cuanto a Hannegraff, no le puse la etiqueta de “antisemita” simplemente, expuse que su “postura” y argumento si lo es. NO soy dispensacionalista, aunque conozco la escuela dispensacional. Tengo serias diferencias con la hermenéutica dispensacional de Larkin, Dake, Darby y Schoffield para solo mencionar algunos, sin embargo reconozco la aportación que han hecho al análisis de la historia y la profecía bíblica. Como bien senalas, a Hannegraaf se le pasa la mano al culpar por asociacion.& nbsp.
Respecto a Hanegraaff, yo hice referencia a su libro no porque esté de acuerdo CON TODO lo que él escribe, sino porque creo que menciona algunos puntos correctos y son esos puntos los que yo deseaba resaltar. Personalmente también tengo ciertas diferencias con algunos puntos de vista de Hanegraaff. Por ejemplo, Hank es un Arminiano que aunque él se autodenomina como un Calvinista Moderado de 4 puntos, niega totalmente las doctrinas básicas de la teología reformada.
El libro que escribió (The Apocalipse CODE), es una crítica muy ácida del dispensacionalismo y personalmente no estoy de acuerdo con algunas cosas que dice. Por ejemplo, en algunas partes de su libro él da la impresión de que el sistema Dispensacionalista es otro CULTO más, o como si fuera una nueva HEREJIA. Esto es muy lamentable por parte de Hank debido a que él se encuentra en una posición muy respetada entre el pueblo evangélico. Además, como un experto en doctrinas falsas él debería ser el primero en saber que el dispensacionalismo NO ES una secta o herejía. Podemos tener diferencias muy marcadas con los postulados Dispensacionalistas, pero siempre debemos representar lo que otros creen de la manera más fiel y exacta posible, diferenciando muy bien entre lo esencial y lo no esencial.
Otro ejemplo que ilustra a lo que me refiero es el caso de Dave Hunt, quien tambien siguió el mismo ejemplo cuando criticó al Calvinismo en su libro titulado “WHAT LOVE IS THIS?”, y creo que el no hacer una distinción correcta de lo esencial con lo no esencial, conduce muchas veces a cometer este tipo de errores serios. Aunque ya no estoy más de acuerdo con los postulados Dispensacionalistas, tampoco puedo tildar a dicho sistema de "herético" debido a que la escatología no es algo que atente en contra de las doctrinas básicas del evangelio. Creo que debe existir un gran margen de tolerancia entre los cristianos evangélicos en el campo escatológico debido a que estas enseñanzas no son algo que sea fundamental para la salvación.
Tienes mucha razón en cuanto a los “dispensacionalistas” que utilizan la palabra profética para justificar conductas contrarias a la moral, la justicia y el inalienable derecho a la vida de todo ser viviente no importa su color, raza o ideología. NO soy de ese grupo. Los argumentos de dicho grupo obedecen a que en sus ideas mezclan conceptos calvinistas con propuestas dispensacionalistas radicales. Y en este sentido me consta que especialmente hay pentecostales que lo aplican en cualquier caso donde explican mediante el determinismo lo que no les parece reconciliable.
Cuando mencioné a David Koresh y su secta, fue para ilustrar la premisa que usé en mi artículo anterior: que una idea o doctrina equivocada conduce casi siempre a resultados equivocados. Por ejemplo, la actitud subversiva de Koresh respecto al gobierno de este país no fue realizada en un “vacío” ideológico o doctrinal. Koresh sinceramente creía que el gobierno de los E.U.A era en realidad la bestia o el anticristo y que era su deber luchar contra él. ¿Cómo pudo él llegar a esas conclusiones? Gracias a una interpretación equivocada de la escatología o profecía bíblica sacada en su mayoría fuera de contexto.
Pregunto: ¿Acaso no registra la Biblia que Jehová Dios le entrego un territorio a la nación de Israel y fijo sus limites geográficos? ¿Por cuanto tiempo le dio por pertenencia dicho territorio? ¿Cuándo y como caduco el tiempo de pertenencia? ¿Qué dicen las Humanidades sobre el asunto y en que concuerdan con lo que dicen las Escrituras y en que no? ¿Quién tiene derecho a negarle a un pueblo o nación lo que Dios le ha dado como su territorio? Si la Biblia nos merece credibilidad y le reconocemos validez y vigencia, tenemos que preguntarnos: ¿Cuántos pueblos están ocupando espacio territorial que Jehová Dios soberanamente dispuso para Israel?
La cuestión del territorio tal vez no sea todo el problema. Si ese fuera el único problema, quizás ya se hubiera resuelto desde hace mucho tiempo ese conflicto. El problema puede ser mucho más profundo que eso: puede ser una enemistad histórica entre ambos pueblos. Lo que yo pienso es que en este conflicto no debemos favorecer a Israel usando el argumento de que es el PUEBLO ESCOGIDO por Dios y negando cualquier derecho a los palestinos, o que nadie más puede vivir en esas tierras sino solo el pueblo judío. Si ellos tienen derecho a vivir en esas tierras, también los palestinos la tienen pues son seres humanos y Dios también les ha concedido el derecho a una porción de territorio en ese lugar.
Veamos lo que dijo el apóstol Pablo inspirado por el Espíritu Santo cuando predicaba a los habitantes de Atenas:
“El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en el hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; Y LES HA PREFIJADO el orden de los tiempos, Y LOS LIMITES DE SU HABITACIÓN” (Hechos 17:24-26).
Como podemos ver, no solamente a Israel Dios le dio un territorio, sino también a cada una de las naciones que existen y que han existido. Por esa razón no debemos creer que solo el pueblo judío TIENE UN DERECHO DIVINO al territorio, sino también los pobres palestinos que han vivido en ese lugar por siglos. ¿Qué se va a hacer entonces con los palestinos? ¿Acaso van a exterminarlos para que los judíos puedan vivir contentos ya sin palestinos en ese lugar? ¿Acaso se cometerá otro horrible genocidio en el siglo XXI?
EL RACISMO no solo es pecado, sino que es también prohibido en los versículos arriba mencionados. Por eso, todo verdadero creyente no debería nunca dar lugar en su vida a la discriminación racial. Tristemente eso es lo que los judíos se encuentran haciendo con los palestinos y viceversa. En este caso, a ambos grupos se les condona esa acción pues no son cristianos y por ende, no conocen el evangelio de salvación. Por eso creo que el conflicto entre ellos debe ser abordado no apelando AL DERECHO DIVINO de los judíos, sino al derecho INALIENABLE de todos los seres humanos para vivir y existir en este mundo, ya que todos hemos sido creados a imagen de Dios. Si este tema se aborda desde un punto de vista que favorezca a un grupo o a otro, existe el peligro de cometer injusticias tanto raciales como sociales en contra de los palestinos o de los judíos.
Sin duda que el meollo del conflicto es muy complejo. Esta demas decir que Israel como nación no es aceptado en el Mediano Oriente, y que no es santo de la devoción internacional, y sabemos que es el alto costo de su rebelión y obstinación contra Dios. Ojala, y mañana hubiese un pacto de convivencia en el desierto y que en Jerusalén se le hiciera honor al nombre de la histórica ciudad. Sin embargo, los Palestinos e Israelíes no están solo en todo este proceso, Hay terceros y cuartos que tienen sus fichas metidas en el tablero.
Tiene mucha razón en esto. Y aún cuando sabemos que Israel ha estado siendo disciplinada como nación, nunca debemos aprobar o promover el anti-semitismo. Desafortunadamente, cuando algún creyente cuestiona el proceder de los judíos en cualquier área, siempre va a ser señalado como un anti-semita. He recibido cartas de cristianos que creen que puedo recibir un “castigo de Dios” por denunciar o hablar en contra de los actos de los judíos que violan los derechos de otras personas.
Esta mentalidad es la que impera entre la mayoría del pueblo evangélico de la actualidad. ¿Cuál es la razón para esto? Tal vez esté equivocado, pero creo que la razón para esta clase de mentalidad han sido las enseñanzas Dispensacionalistas tan divulgadas por medio de las novelas de ficción de Tim LaHaye “Left Behind”, así como otras obras muy populares que cuentan con una gran acogida entre el pueblo evangélico y que presentan al pueblo judío étnico como el principal protagonista y como foco de atención de todas las naciones en los últimos días.
Irónicamente, esos mismos creyentes que me dicen que Dios puede castigarme por hablar de esta manera del pueblo judío, tal parece que no se dan cuenta que son ellos los que al fin de cuentas promueven con sus peculiares enseñanzas, un verdadero antisemitismo disfrazado con “slogans” tales como “Amigos de Israel”, etc. ¿Por qué digo esto? Porque el dispensacionalismo tradicional enseña que el Anticristo debe hacer un pacto con el pueblo judío por 7 años, pero que a la mitad de esos 7 años romperá su pacto y traerá una persecución y masacre al pueblo judío mucho mayor aún que el Holocausto por parte de Hitler.
Timothy P. Webber escribió un libro muy interesante que vale la pena leerlo. El libro se titula: “On the Road to Armageddon: How evangelicals Became Israel’s Best Friend”. En este libro, Webber deja al descubierto la verdadera naturaleza del Dispensacionalismo y lo que esas enseñanzas pueden traer si se siguen hasta sus conclusiones lógicas. Webber escribe:
“Desde sus mismos inicios, los Dispensacionalistas demostraron una mezcla extraña de pasivismo y activismo. Los críticos afirmaban que el Dispensacionalismo inoculaba a sus adherentes con esa clase de pasividad de “no hagas nada”, principalmente debido a su cosmovisión pesimista y fatalista: la civilización está destinada al fracaso, las fuerzas del mal finalmente arrollarán a las fuerzas del bien y no hay nada que nadie pueda hacer para evitarlo. En otras palabras, el Dispensacionalismo destruye al activismo cristiano al hacer de sus seguidores, solo observadores pasivos del mundo destinado al fracaso. Los Dispensacionalistas contentos de dejarle todas las cosas a Jesús en su segunda venida, se repliegan hacia atrás y no hacen nada mientras el mundo da tumbos fuera de control.
Para cualquiera que esté familiarizado con las expectativas Dispensacionalistas del futuro, tales acusaciones tienen un cierto tono de verdad en ellas. Los Dispensacionalistas creen que el mundo se encuentra en un viaje descendente fuera de control, a pesar de los esfuerzos realizados para mejorarlo. Ellos niegan que los esfuerzos heroicos de los Reformadores cristianos, los evangelistas y los misioneros tengan éxito en resolver los problemas del mundo o de impedir su trayectoria descendente. Pero tales estereotipos fallaron miserablemente en la década de los ‘80s cuando los Dispensacionalistas descubrieron su voz política y se convirtieron en una fuerza que debía ser tomada en cuenta. Con la llegada de la Nueva Derecha Cristiana, entonces los Dispensacionalistas demostraron ambas cosas: un fuerte fatalismo respecto al declive de la civilización y un fuerte rechazo por reformarla. ¿De donde vino esta extraña mezcla de activismo y pasivismo?” (Timothy P. Webber, On the road to Armageddon, p.45, Baker books 2004).
Ciertamente los Palestinos no son una BOLA DE TERRORISTAS, pero HAMAS, HEZBOLAT y otros grupúsculos han tomado la bandera palestina y su justa causa como pretexto para avanzar la agenda de exterminio de Israel. ¿Cuánto vale la vida de un ser humano para un terrorista suicida que no valora la suya? ¿Qué respeto tiene una organización terrorista y religiosamente fanática por la diplomacia y la mesa de negociaciones? Y en algunos sectores de la opinión publica, eso esta BIEN. No es justificable la matanza de inocentes de cualquier lado como tampoco lo es la intolerancia e insensatez aferrada al egoísmo y la cobardía moral para sustentar un fanatismo cruel e inhumano, venga de donde venga.
Este es el aspecto más difícil de abordar debido a que ambos grupos se culpan el uno al otro por los acontecimientos. Los judíos culpan a los palestinos y los palestinos culpan a los judíos. Pero aunque ambos bandos son igualmente culpables, ¿Qué culpa tienen las mujeres y los niños de todo esto? Deberían ser las fuerzas militares las que ultimadamente salgan al desierto y allí peleen y se maten unos a otros, si así lo desean, pero sin involucrar a los civiles.
Daviel, me consta que el EVANGELIO se le ha predicado tanto a judíos como palestinos, y quienes lo hacen lo están haciendo a riesgo de su propia vida. En dos visitas, especialmente al territorio de Israel y por la comunicación con misioneros en áreas de conflictos sumamente peligrosos, he constatado la misión de hombres y mujeres especialmente latinos qu e luego de entrenarse se infiltran para conectar tanto judíos como palestinos a Yeshua El Messiah, el que finalmente en sus alas le traerá Salvación.
Que la Gracia suficiente de nuestro Dios Padre y del Senor Jesucristo sea contigo,
Ephraim Rivera
Esta es la actitud que todos los que conocemos el evangelio debiéramos tener. Estar siempre concientes que, aún por encima de su necesidad por territorio, ambos pueblos necesitan desesperadamente el evangelio de Jesucristo que es el que finalmente les dará la verdadera libertad.
Que Dios le continúe bendiciendo
Daviel D’Paz
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