Esta táctica no es para nada nueva. Podemos ver como fue usada en contra de Cristo y sus discípulos. La diferencia es que, contrario a los ataques personales usados por algunas personas en la actualidad, los enemigos de Cristo llevaron este principio hasta sus últimas consecuencias: “Si no puedes matar el mensaje, entonces mata al mensajero”. Esto quiere decir que cuando no se puede contradecir ciertos argumentos debido a que son irrefutables, entonces existe otra alternativa que sí puede funcionar: atacar y desacreditar a la persona cuyos argumentos no pueden ser refutados. Esta táctica no solo es sucia, sino es también completamente anti-cristiana. Lamentablemente es usada a menudo por aquellos que afirman ser cristianos y que defienden el evangelio de salvación.
Un ejemplo de esto son los ataque personales hacia James White por todos aquellos que se han empecinado en defender la integridad de Ergun Caner cueste lo que cueste. Ergun Caner ha afirmado cosas que no ha podido demostrar y como resultado, muchos de sus defensores han tenido que apelar a los ataques personales para poder amedrentar a aquellos que han estado presionando para que Ergun Caner demuestre que todo lo que él ha afirmado tanto en audio como en video es verdad. Este es el primer ejemplo de un ataque personal hacia James White enviado por un defensor de Ergun Caner llamado Craig Daliessio y nos muestra hasta qué punto puede llegar la sucia táctica de los ataques personales:
“Escúchame burro, si vas a citar lo que puse en mi facebook, UTILIZA MI NOMBRE y cítame en contexto. Yo soy nadie y no tengo nada que perder. No tengo que preocuparme de lo que piense la CBS, tal como el Dr. Caner lo debe hacer. Mi crecimiento y desarrollo en el Sur y mi justa indignación aunado con mi aversión hacia fraudes como tú, no me impiden ni en lo MINIMO el estar presente en tu próxima presentación pública y meterte mi bota en tu trasero. Tu me enfermas y enfermas al cuerpo y ofendes al Espíritu del Dios que afirmas servir, pero que no conoces, excepto en las polvorientas páginas de una teología técnica interminable que sin duda ni siquiera has visto UNA VEZ en acción por parte de Dios. Tu velo es muy delgado, mi arrogante amigo reformador. Deberías firmar todos tus escritos con el nombre de “la señora Turpin”. http://www.aomin.org/aoblog/index.php?blogid=1&archive=2010-05
Para los que deseen darse cuenta del significado del ataque de Daliessio cuando dice que James White debería firmar sus escritos como la señora Turpin, pueden ver este enlace para darse cuenta quien fue la señora Turpin:
Uno pensaría que esta clase de ataques solo pueden provenir por parte de aquellos ateos o de personas anticristianas. Pero la verdad es que provienen de aquellos que se dicen ser creyentes y llenos del Espíritu de Dios. Pero la cruda realidad es que esta clase de ataques solo pueden ser realizados por personas que no conocen el verdadero evangelio y que en su lugar tienen una religión solamente. Como cristianos debemos oponernos a toda costa hacia este tipo de ataque por personas cuyos motivos no son los correctos.
James White explica el por qué muchas personas actúan de esta manera: porque han sucumbido ante el síndrome del “estrellato” y de las “personalidades”. Si un líder evangélico es popular y cuenta con una lista de libros mejores vendidos, entonces no te atrevas a CUESTIONARLO. Esta mentalidad lamentablemente es la que impera en el mundo evangélico de la actualidad. Ergun Caner es un claro ejemplo de esto. Se ha convertido en todo un “personaje” de los medios de comunicación que el cuestionarlo es sinónimo de herejía. ¿Quién es James White para que se atreva a cuestionar lo que Ergun Caner ha afirmado? ¿Quién es James White para que se atreva a cuestionar las afirmaciones de un presidente de Seminario? Esta clase de mentalidad no es originalmente cristiana, sino que la hemos tomado prestada del mundo del espectáculo y la farándula.
La evidencia presentada en el caso Caner, es tan abrumadora que ninguna persona que carezca de objetividad puede afirmar que se está cometiendo una gran injusticia al pedirle explicaciones a Ergun Caner. Sin embargo, tal parece que esto YA ES PROHIBIDO entre los círculos de las “personalidades evangélicas”. No puedes ni siquiera cuestionar lo que este o aquel predicador afirma debido a que se han rodeado de una aureola de luz que los convierten en seres casi intocables. James White nos da las razones de esto de la siguiente manera:
“When you ask these people if they have even bothered watching the videos, reading the documentation, checking the facts, the vast majority have not. They have been told by others "people are attacking the great Dr. Caner!" and that's all they need. Facts matter nothing. But for others, there is no limitation on how far they will go. Ad-hominem attack upon anyone who would stand up and say "Dr. Caner must answer these questions for the sake of the integrity of his position and the work of the gospel" is the name of the game. I have rarely seen the kind of vitriol spewed my direction as I have over the past few months since this issue arose. And, as normal, the primary purveyors of hatred and insult have been Baptists. This has been my experience for twenty years now: no one, and I mean no one, outside of rank, God-hating atheists, can out-do a Baptist when it comes to acting in the most non-Christian ways. My parentage, my spirituality, my scholarship---it matters not, it is fair game for the sin of having dared to question Ergun Caner's story. As if I am even slightly relevant to the documented facts that have been produced.
I hear Peter Lumpkins (one of the chief purveyors of addled thinking in the promotion of Canerism today) has raised questions about my being an expert on Islam. Once again Lumpkins shows himself utterly incapable of either research, or honesty, or both. Those who have taken the time to listen to my debates, or listen to my lectures, or listen to my interactions with Islamic claims on the Dividing Line (such as the current response I am offering to Sheikh Awal) know that I have consistently eschewed the title of "expert on Islam." Honest people know I refer to myself as a student of Islam. I began studying it in 2005 in preparation for my debate with Shabir Ally at Biola in May of 2006. This information would not be hard to obtain, if Peter Lumpkins cared to obtain it. But unlike how we have carefully sought documentation in reference to asking the important questions of Ergun Caner, Peter Lumpkins and his fellows (Guthrie et al) have no concern for context or serious research. No, they are desperate for something to throw in the air to distract from the ever-growing list of questions that are being asked of Ergun Caner, so any old thing will do. So once again Peter Lumpkins has beaten up a straw-man of his own imagination, which is about as far as he has ever gotten in his campaigns of late.
….So I ask Peter Lumpkins: who has been honest in this situation? The one who has rejected being called an expert in Islam, who has often said that he is too old now to ever learn all he needs to know in that field (life is too short), but who has taken what he has, in fact, learned, into the very forefront of apologetic exchange with Muslims on three continents, or Ergun Caner, who fabricated the grounds of his alleged expertise? The answer is obvious. Will Peter Lumpkins admit it?”
Sin duda que todos los que deseamos hablar la verdad, podemos sentir un rechazo hacia los ataques personales que no tienen nada que ver con el tema en cuestión. Se ha generado una campaña en contra de James White por parte de varios defensores de Ergun Caner cuyo único objetivo es enlodar la imagen de James White a como sea. En este juego sucio, tal parece que los principios éticos no tienen cual ninguna importancia, pues lo único que importa es defender a los culpables y para ello usan cualquier clase de subterfugio sin importar si es válido o no.
Tal es el caso de Peter Lumpkins quien se ha involucrado en defender a Ergun Caner a pesar de toda la evidencia en su contra. Para ello, ha tenido que atacar de manera PERSONAL a James White cuestionando su trasfondo educacional y otras cosas más por el estilo. Peter Lumpkins es una clara muestra de como actúan los abogados corruptos en la actualidad: defendiendo a los culpables aún cuando toda la evidencia pese en su contra. Esto puede esperarse entre los círculos de incrédulos, pero no entre aquellos que dicen ser fieles a la verdad del evangelio.
Daviel D’Paz